Ángel Raúl Chilpe, de 37 años, murió tras ser atropellado por un auto negro, marca Nissan, modelo Infinity, del año 1999, con placas PVX0747, a las 12h10 del domingo 6 de octubre de 2019 en el kilómetro 58 de la carretera Cuenca-Molleturo-Naranjal, sector El Chorro, donde un grupo de manifestantes había cerrado la vía, en protesta por la derogatoria del subsidio de los combustibles decretada por el Presidente Lenín Moreno.

Chilpe, según sus familiares, murió de contado. Tendido en el suelo, sin que la ambulancia que se dirigía al lugar del accidente pudiera arribar al lugar por la consigna de los manifestantes de no permitir el paso de ningún vehículo. A las 16h00 cuando un paramédico pudo llegar caminando hasta el sitio, se verificó su muerte y se ordenó el levantamiento del cadáver.

La familia de Chilpe ha contado a este sitio que Ángel Raúl estaba ahí de casualidad y que no formaba parte de las protestas.  Dicen que había salido en una moto, a las seis de la mañana, desde Luz María, una pequeña comunidad agrícola en Molleturo, provincia del Azuay, para acompañar a su hermano Nelson, de 52 años, que debía viajar ese día a Cuenca para regresar a su trabajo.

Nelson cuenta que al no poder pasar la barrera que los manifestantes habían levantado en el kilómetro 58, decidió seguir a pie, pidiéndole a Ángel que lo espere ahí para que lo regrese a Luz María en la moto por si no lograba conseguir un vehículo que lo lleve a Cuenca.

Luis Mogrovejo, abogado del ingeniero Patricio Carrión, acusado por la Fiscalía de muerte culposa (tras aceptar que él manejaba el vehículo, en que iba con su esposa, y que atropelló a Chilpe), dice que su defendido, al insistir en traspasar la barrera, fue atacado por los manifestantes con piedras y palos, y que le destruyeron el parabrisas. Narra que uno de ellos, que presume que era Chilpe, se avalanzó con una piedra para lanzársela y que Carrión reaccionó cerrando los ojos y acelerando el vehículo para huir del lugar.

¿Por qué presume que el que lo atacó era Chilpe? Según Mogrovejo porque Carrión, aunque dice que cerró los ojos, sintió que golpeó con su carro al atacante. Porque el Nissan, además del parabrisas destrozado, muestra un golpe en el faro izquierdo. Y porque la autopsia de Chilpe, cuyo cadáver estaba en la mitad de la carretera, demuestra que tenía el tórax destrozado por un fuerte golpe.

Ángel Raúl Chilpe, el quinto de seis hermanos de una familia de campesinos, era soltero y no tenía hijos. Vivía con su madre, Delia Chilpe, una mujer de más de 70 años con problemas para caminar, a quien mantenía. No tenía trabajo fijo, pero conseguía lo que podía como jornalero, recogiendo papas o lo que se cosechara. Había sido catequista de la iglesia de Luz María, y sus vecinos lo describen como un hombre alegre y dedicado a la comunidad. La casa en que vivía era un pequeño rancho de construcción mixta, con apenas tres cuartos.

¿Era Ángel Raúl Chilpe, como relata su familia, totalmente ajeno a la protesta y sin ningún interés por la política? El último post subido a su página de Facebook, el 5 de octubre, es un video sobre los disturbios en Ibarra. Desde el 2 de octubre, al día siguiente de que Moreno anunciara el decreto, Chilpe ha posteado todos los días videos sobre la protesta. Uno de ellos dice: “Vamos a enseñar a los venezolanos cómo se tumba un presidente”. Entre los sitios que le gustan se encuentran dos del expresidente Rafael Correa. En otra página de Facebook suya se encuentra la fotografía de cuando fue candidato al Gobierno Parroquial de Molleturo por la alianza Unidad Popular (antiguo MPD) y Molleturo Primero. No fue electo.
Sin embargo, era un vecino apreciado. A su entierro asistió todo el pueblo. Su cadáver descansa en una tumba sencilla, en la pequeña comunidad de Luz María, que comparte con su hermano Víctor, fallecido dos años antes.